Descubre los cinco pasos clave para trazar curvas en senderos con rapidez y seguridad. Y como plus, te damos tres consejos extra para perfeccionar tu técnica.
Cómo trazar la curva en un sendero
- Nos dirigimos a la curva anticipando más, nos abrimos y estudiamos dónde podemos frenar con mejor agarre y seguridad.
- Comenzamos el movimiento hacia el interior de la curva dejándonos llevar, relajados y con la vista en el interior de la curva.
- En el interior debemos controlar nuestra posición con brazos y piernas semiflexionados sin dejar de visualizar la trazada más redonda posible.
- Si en la misma salida de la curva nos encontramos con numerosas piedras sueltas, estaremos obligados/as a alargar la salida e irnos a buscar directamente el exterior.
- Una vez superadas las piedras del exterior, encontramos mejor agarre y giramos del todo para enfrentarnos al siguiente tramo.
Trazar la curva en un sendero: 3 maneras de mejorar
- La forma más efectiva de hacer frente a una curva es…
- Abrirnos lo máximo posible en la entrada
- Cerrarnos hasta el vértice de la curva en el interior.
- … y volvernos a abrir en la salida.
- La dificultad añadida es el propio terreno en sí. Debemos anticipar más la frenada y girar donde visualicemos que tenemos un mejor apoyo y agarre para nuestra rueda delantera acompañando el giro de la bici.
- Si la pendiente de la curva es pronunciada, debemos de retrasar proporcionalmente nuestro peso para controlar el centro de gravedad.
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