Los pedos y el running Los pedos y el running

Este post apesta: Los pedos y el running

Hemos pensado muchas posibles formas de titular esta entrada de nuestro blog sobre los pedos y el running: “A todo gas”, “Impulsa tu carrera”, “Mira detrás de quién te pones”, “Por qué nadie habla de esto”, “El post más tóxico”, “Ese sonido de trompeta no me está indicando la salida”…

No nos ha sido fácil abordar este dramático tema que aturde a los y las runners de todo tipo y condición, y de hecho hemos decidido realizar un artículo colectivo para no señalar a ningún bloguero como “experto/a” en este tema.

Para nosotros es una obligación moral no censurar ningún tema relacionado con el running, por muy mal que huela. Por eso, en este post sobre los pedos y el running vamos a…

  1. Responder a la pregunta de ¿Por qué cuando corro me entran tantas ganas de tirarme pedos?
  2. Daros algunos consejos para evitar que estas flatulencias emerjan en el momento más inoportuno.
  3. Qué hacer si finalmente ocurre…válido para gases propios y/o ajenos.
  4. Contaros algún espeluznante caso real.

Los pedos y el running

¿Por qué me tiro tantos pedos cuando entreno?

  • Evidentemente, todo esto tiene que ver con el proceso digestivo. Cuando haces un ejercicio aeróbico como el running y comienzas a sudar, estás acelerando la digestión. De este modo, todo lo que has comido se mueve más rápido de lo previsto incitando a tu cuerpo a expulsar esos gases que se van acumulando en el intestino.

Los pedos y el running

  • Otra razón es, por supuesto, la respiración. Cuando vas corriendo, sobre todo si haces “el truco” de respirar por la boca para meter más oxígeno al cuerpo e ir menos fatigado, vas acumulando un exceso de aire en el tracto gastrointestinal que sólo puedes liberar de una forma. Sí, de ESA forma, en modo trompeta.

Los pedos y el running: ¡Una solución quiero!

1. Cambia tu alimentación: Nos lo cuenta nuestro bloguero Dani Oneka: “Cuando uno empieza a correr hay hábitos que paulatinamente van cambiando. Uno de ellos es la alimentación, especialmente cuando se empieza a entrenar un poco en serio y competir. A mí me pasaba que tenía muchos ardores y en algunas ocasiones en forma de gases que me impedían hacer el entrenamiento a fondo.

Automáticamente fui buscando las posibles causas (ensayo y error) y aquellos alimentos que me convenían para evitar esas sensaciones. Fui eliminando de mi lista aquellos que no me iban bien (personalmente eran la leche, lácteos y alimentos fritos).  En lugar de hacer comida fuerte, hacía un desayuno y aperitivo variado para llegar al mediodía con el estómago en condiciones pero full de energy. Después de correr recuperaba con algo de fruta, membrillo y cereales con yogur y vuelta al trabajo.

Algo que cuidaba especialmente los días de entreno es la hidratación, a base de agua durante el día para llegar en perfectas condiciones al entreno. Después de entrenar y muy importante en esa ventana metabólica de 30′ que se abre una vez acabas el entreno, duchita, cambio de ropa y alimento/bebida; solía llevar algún batido recuperador o una ensalada con un poco de todo.

Los pedos y el running

2. Llega al entreno con la digestión bien hecha: Especialmente si el entreno es intenso. Bien hidratado. No hagas comidas muy fuertes, ya que ralentizan mucho el proceso digestivo.

3. Evita leche de origen animal -muy poco digestiva-, alimentos fritos e industriales.

4. Haz tentempiés ligeros a base de frutas, frutos secos y cereales tipo avena. Eliminar de tu lista aquellos alimentos que no te sientan bien de cara al entreno.

5. Respira sólo por la nariz: Si parte del problema es en exceso de aire que puedas estar metiendo a tu cuerpo, intenta respirar sólo por la nariz, con respiraciones controladas.

Los pedos y el running

Los pedos y el running: Truquillos

Si finalmente ocurre, y la flatulencia propia o ajena sale a la luz, tienes diferentes alternativas:

1. El último de la fila: Éste es de nuestro tester y entrenador Ritxar Fernández: “Sinceramente creo que el expulsar el aire del estómago muchas veces es imprescindible para poder seguir corriendo: digestiones, nervios etc… lo único, las cosas se hacen con delicadeza: te sitúas el último de la grupeta, procedes y listo 😜”.

2. Huid, insensatos: Nuestros testers Igor Quijano y Roberto Garay proponen escapar lo más rápido posible del lugar de los hechos: “No sé si es por los geles, los nervios o el fresquito mañanero en la tripa, pero hay personas que parece que se están descomponiendo en su interior”, dice Igor, que recomienda: “A mí ese ‘ambiente’ me sirve de motivación extra cuando dan el pistoletazo de salida. En ese momento yo no corro, yo huyo lo más rápido posible del lugar contaminado”.

Por su parte, y como corredor de ultras, Roberto sabe que en carreras largas “el cuerpo pasa por muchas etapas, tiene unas cuantas resucitaciones y le metemos mucha suplementación a la cual no está habituado, razones por las cuales genera más gases y de peor olor”. ¿Su recomendación? “Cuando te plantas en la línea de salida de un ultra a las tantas de la madrugada con un frío del carajo, un simple pedo de algún otro corredor puede convertirse en la tecla para activarte y salir de allí cagando leches, nunca mejor dicho”.

3. Disimula: Zaloa Álvarez, otra de nuestras testers, opta por dejar que el pedo se pierda entre la multitud: “No son mayor problema, puesto que son bastante fáciles de disimular. Al estar corriendo, cualquier pedo que te eches se va a quedar atrás —a no ser que tengas el viento en tu contra—, y al estar en un grupo numeroso de atletas, el autor del gas suele ser bastante difícil de identificar”.

Los pedos y el running

4. Hoy por ti, mañana por mí: Zaloa juega también la carta de la empatía, del “podría pasarte a ti”: “Por lo que he podido comprobar a lo largo de los años, los pedos están socialmente aceptados entre los y las atletas, por lo que no debemos avergonzarnos de no poder parar de echárnoslos. En todo caso… es una forma de impulsarse!” Al fin y al cabo, como nos recuerda Igor, “Lo que pasa en carrera, se queda en carrera”.

5. Que corra el aire: Una técnica final que nos cuenta Roberto sería la de respetar el espacio de seguridad entre runners… “Tanto si sois la víctima como el verdugo, echaros a un lado y no os ”caguéis” en nadie ya que todo lo que entra por algún lado tiene que salir. Evitad pegaros mucho en caminos estrechos al corredor de delante, sea hombre o mujer ya que los pedos de nadie huelen a rosas”.

Los pedos y el running

Los pedos y el running: Un Caso Real

Nos lo cuenta Jesús Beamonte, runner de amplia trayectoria vinculado también a nuestro blog.

“Recuerdo con intensidad el “pedete” que literalmente me comí acudiendo a mi primera Santurce a Bilbao. Son muchos los factores que un corredor debe controlar antes de una carrera. Entrenamiento activo, pasivo, alimentación, hidratación, equipación, dorsal, horarios, algún gelillo…

Todo esto, con método y experiencia, se puede llegar a dominar. Pero nada es comparable a dominar a la bestia que cada corredor lleva dentro y que decide salir en el momento más inapropiado.

Vuelta a mi primera Santurce-Bilbao.

Os sitúo.

Andén dirección Santurce.

Se respira carrera…

Llega el tren, montamos tranquilamente, vagón lleno. Se palpa el ambiente pre carrera, sonrisas, anécdotas, y la cantinela del corredor. Que si estoy mal, llevo arrastrando una lesión de gemelo, no he entrenado nada…Bla, bla.

El volumen de las conversaciones hace difícil mantener la del grupo y de repente, como una oleada, se hace el silencio. Alguien traga saliva, los corredores miran al techo… al suelo… silencio.

No soy capaz de recordar el tiempo que estuve inmerso en aquella atmósfera.

Solo recuerdo una bocanada de aire fresco al abrirse la puerta del vagón, salir precipitadamente… y olvidar.

Fue tan intenso que hasta hoy no había vuelta a hablar de ello.

Fue tan intenso que he tratado de olvidarlo hasta hoy.

Fue tan intenso que… no recuerdo si fui yo.

Los pedos y el running

¡Esperamos que este post te haya sido útil! Nos da en la nariz que tu también tienes alguna anécdota al respecto así que.. ¿Qué te parecería compartirla con nosotros? 😉

Por Equipo del blog de running en Forum Sport.

6 comentarios

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  1. Muy interesante este artículo con relación a los nervios.
    Ojalá ver más artículos así.

  2. Esto me matado de risa que se me escaparon los pedos jajaja qué alivio pensé que solo a mi me pasaba está tragedia bueno entonces a seguir corriendo y a turbo

  3. Pingback: Café, leche y Running: un trio peligroso donde los haya.
  4. No me he podido reir y divertir más con este artículo!!
    Real como la vida misma… «PEDOS»
    Enhorabuena… 🙂
    Eva