El Pico Gilbo (1.674 m.) es uno de los ascensos más emblemáticos de la montaña leonesa. Hundido en las bellas aguas del embalse de Riaño, te contamos al detalle la ruta para conquistarlo: ¿Nos acompañas?
La polémica presa fue construida en 1987 en el curso alto del río Esla, en el Parque Regional de la Montaña de Riaño y Mampodre. El reflejo en la superficie del pantano aumenta el atractivo natural de la montaña y concede a la cumbre un hechizo irresistible.
El sobrenombre de “cervino leonés” se debe al semblante que muestra desde el pueblo de Riaño, con la marcada arista noreste colocada en la esbelta cresta de la pirámide de piedra. Un auténtico centinela de la Montaña Oriental Leonesa y las puntiagudas cumbres de Riaño.
Hay tres itinerarios habituales de ascensión hasta la cima del Pico Gilbo:
- La ruta de la vertiente norte sale del lado sur del viaducto del embalse, sigue la orilla del lago artificial y conecta con los senderos que suben por la cara sur y este en el collado de Vallarqué.
- El pueblo de Carande también es punto de inicio de las ascensiones montañeras en las murallas calcáreas del Gilbo.
- Nosotros proponemos la tercera opción: saliendo de las casas de Horcadas por el sendero de pequeño recorrido PR-LE 52 y el collado del Baile.
Horcada (Km 0. 1.140 m. 30 333289 / 4756418)
La referencia para salir de Horcadas es la iglesia del pueblo, en la parte alta del caserío. En el primer cruce de caminos hay un panel informativo del PR-LE 52 hacia Carande por el collado del Baile. La ruta sale directa hacia el norte por la ladera de los montes.
El sendero de pequeño recorrido sale por un camino ganadero hacia la izquierda y es otra opción para subir a los pastizales de Cueto Casnello.
El primer tramo del camino sube por un bosque de robles en las laderas del monte El Raso y entra en las praderas pastoriles del Cueto de las Vegas.
La muralla meridional del Gilbo parece una fortaleza inexpugnable.
La pared calcárea no ofrece a simple vista ninguna posibilidad de ascensión pero es una característica de las cumbres calizas. Después siempre aparecen fisuras, canalizos, terrazas, resaltes y multitud de relieves esculpidos por la disolución que produce el agua de la lluvia en las rocas calizas.
Cueto de las Vegas (Km 1. 1.260 m. 30 333284 / 4757238)
El camino ganadero rodea el Cueto Casnello y entra en las bonitas praderas del Cueto de las Vegas. En la izquierda del carril hay un abrevadero de ganado con guente y varias trazas de senderos y huellas de los rebaños.
Una de las sendas es el camino de bajada desde la cresta del Pico Gilbo en el camino de vuelta. La ruta sigue por el carril principal, marcado con las señales del PR-LE 52.
Desvío (Km 1,3. 1.300 m. 30 333512 / 4757471)
El camino sube un repecho suave y gira hacia la izquierda por unas rodadas poco claras en la ladera de hierba.
El carril principal está marcado con los galones blancos y amarillos del PR-LE 52, sigue de frente por un bosquecito de robles para salvar una colinas y baja al pueblo de Carande por el collado del Baile.
Las rodadas suben directas por la ladera de la montaña hasta la base de la muralla del Gilbo y giran hacia la izquierda donde se pierden en las sendas montañeras y las trazas de los rebaños.
Antes de llegar al hombro donde terminan las rodadas hay que tomar un sendero poco claro hacia la derecha, casi campo a través, que lleva rumbo norte.
La senda está marcada con hitos de piedras, pasa por una pequeña colina plana suspendida en la empinada ladera de la montaña y continúa hacia el espinazo este del Gilbo.
Collado Vallarqué (Km 2,4. 1.470 m. 30 333414 / 4758332)
La ruta llega al collado de Vallarqué, en el panorámico espolón oriental del Gilbo. En este paso rocoso se juntan las rutas procedentes del viaducto de Riaño, Carande y Horcadas.
Y también es el inicio de la vía de escalada del Espolón Noreste (PD+). En el collado comienzan una serie de trepadas sencillas (II) y expuestas por escalones rocosos y terracitas de hierba hasta el muro principal (III+) de la arista.
En caso de complicaciones es posible entrar en los resaltes de la cara oeste y evitar este tramo por la derecha.
La vía de escalada llega después a una pequeña antecima y sin complicaciones termina en el cartelito metálico del Gilbo.
El itinerario montañero atraviesa el collado y continúa la ascensión por la cara norte del Gilbo.
La senda está bastante clara en los resaltes de lapiaz, además tiene hitos de piedra y no hay muchos lugares posibles para subir caminando hasta la cima.
Es una ascensión bastante intuitiva y lógica, aunque en algunos pasos es necesario usar las manos y hacer pequeñas trepadas sobre el inmenso vacío que se abre hacia el recóndito valle de Anciles y la cola del embalse de Riaño.
Gilbo (Km 2,9. 1.670 m. 30 333125 / 4758178)
Los hitos del sendero llevan hasta la cumbre del Gilbo (1.674 m). La cima es rocosa y está rodeada de abismos por los cuatro costados, un mirador extraordinario de las montañas de León y Palencia, sin duda una de las vistas montañeras más bonitas y grandiosas de la Cordillera Cantábrica junto con algunos escenarios de los Picos de Europa.
Las cumbres soberbias del Peñas Pintas, el Llerenes, el elegante Yordas y el resto de pirámides de piedra caliza de las montañas de León son un alboroto de relieves bravos y puntiagudos.
La mayoría están al otro lado de la cola del embalse y desde el Pico Gilbo están envueltas en un ambiente aislado y salvaje, parecen lejanas e inaccesibles, aunque realmente son cimas cercanas y accesibles desde los pueblos del alto Esla.
En el horizonte oriental destaca la silueta única e inconfundible del Espigüete, el “cervino palentino”, otra de la joyas montañeras de la Cordillera Cantábrica.
Cresta del Gilbo (Km 3,3. 1.560 m. 30 332774 / 4757929)
El descenso desde la cumbre del Pico Gilbo sigue la cresta occidental de la montaña con cuidado y precaución para evitar tropezones que podrían ocasionar un accidente grave por las caídas laterales.
La travesía del aéreo cordal es espectacular, hay que parar constantemente para disfrutar del panorama.
Una opción es recorrer toda la cuerda hasta el final y volver al punto donde comienza el descenso por el muro de la cara sur.
La bajada está marcada por el paso de los montañeros y también hay algunos hitos de piedras, según la temporada.
La senda baja hacia un colladito claro que tiene pequeñas matas de hierba entre el lapiaz y sigue por la izquierda, directamente hacia las praderas donde se ven a simple vista las sendas que bajan al collado del Baile.
Collado del Baile (Km 4,5. 1.260 m. 30 333310 / 4757340)
La senda termina el tramo rocoso y sigue por una senda clara hasta las praderas del collado del Baile, pasa por el abrevadero y continúa por el mismo carril de subida.
Horcadas (Km 5,5. 1.140 m. 30 333289 / 4756418)
El carril recorre los robledales de las dehesas ganaderas y termina en las calles de Horcadas. ¡Has conquistado el Pico Gilbo y ya puedes celebrarlo!
FICHA TÉCNICA
- Punto de partida y llegada: Horcadas (León).
- Distancia: 5,5 kilómetros.
- Desnivel positivo: 530 metros.
- Cartografía: IGN 1:50.000 (105).
Recomendaciones
- La subida desde el collado Vallarqué hasta la cima es un sendero de montaña con precipicios, está marcado con hitos de piedras pero requiere algo de soltura y seguridad en trepadas de montaña.
- El paseo por la cresta del Pico Gilbo es muy aérea, no tiene grado de escalada de dificultad pero hay que tener precaución, especialmente con niebla, lluvia o ventisca.
Cómo llegar
Desde León por la CL-624 hasta Boñar, continuar por la CL-626 hacia Sabero y girar a la izquierda en la N-621 por Crémenes hasta Horcadas, en la orilla del embalse de Riaño.
¿Quieres ver más opciones? ¡Por supuesto!
Buenas noches y una puntualización sobre un error común.
La cara oeste del Espigüete es casi toda leonesa, como practicamente todo lo que se ve desde el Gilbo es León, salvo vencida la cordada que generalmente por la cima divide León de Castilla (en el Espigüete curiosamente se mete hacia León) alguna montaña que asoma al fondo.
Mucha gente piensa que esas montañas de ese fondo son palentinas, pero no, son León, que posee 433 cumbres entre los 2000 y los 2650 metros, todo un mar de montañas mires donde mires.
Saludines.
¡Gracias por tu comentario! 🙂