Cómo prevenir la aparición de uñas negras en los pies

Muchos deportistas y montañeros están acostumbrados a verse en los pies las uñas negras. De hecho, es una lesión muy común entre los corredores que hacen tiradas muy largas y los que entrenan a alta intensidad. Pero, ¿qué hace que una uña se ponga negra? Lo más habitual es que sea por microtraumas repetitivos en esa uña, pero atención, que hay otras causas que pueden provocar que una uña se te ponga negra y es importante que las conozcas.

¿Por qué se ponen las uñas negras?

El culpable más común de las uñas negras suele ser un golpe o golpes repetitivos en la uña que provocan la rotura de los vasos sanguíneos que hay debajo de ella. Esto se conoce como hematoma subungueal. Los golpes o microtraumatismos repetitivos son muy frecuentes en la práctica del running, senderismo, en los deportes de impacto como el fútbol o sin ir más allá, por llevar cualquier calzado que no te ajusta bien. Ese microtraumatismo repetitivo puede provocar un hematoma leve, que dejará una pequeña decoloración indolora y negra debajo de la uña, o puede generar un cuadro más grave y producir ampollas grandes y con sangre entre la uña y el lecho ungueal.

Si una uña negra aparece poco después de un entrenamiento o tras una jornada llevando zapatos demasiado ajustados o muy flojos, esta es probablemente la causa. Asimismo, la morfología de tus dedos juega un papel importante en la aparición de las uñas negras. Por ejemplo, en unos dedos en garra las uñas sufren más.

¿Cuál es el mejor tratamiento?

En los casos leves, la uña negra se resuelve por sí sola sin tratamiento y desaparecerá una vez que la uña crezca. Ahora bien, cuando la sangre que se acumula debajo de la uña no encuentra vía de salida, la presión que ejerce aumenta y provoca fuertes dolores y una sensación palpitante. No te lo pienses, es el momento de acudir al podólogo en el menor tiempo posible para que te haga el tratamiento adecuado.

Este tratamiento consiste en perforar la uña haciendo pequeños orificios por donde drenará la sangre acumulada. Este procedimiento aliviará tanto la presión como el color oscuro debajo de la uña. Debido al hematoma, la uña se encuentra desprendida del lecho ungueal, por lo que es muy importante que sea un podólogo o un profesional cualificado quien haga este drenaje para evitar posibles infecciones.

En los casos más graves, las ampollas debajo de la uña pueden hacer que la uña se desprenda, parcial o totalmente. Este proceso puede ser muy doloroso si el desprendimiento es solo parcial. Si la uña se separa completamente, está oficialmente muerta y nunca volverá a unirse. Lo bueno de que la uña se separe por completo es que no es doloroso pero puede llevar mucho tiempo para que crezca una uña nueva: alrededor de un año para uñas grandes y de 3 a 6 meses para uñas más pequeñas.

En algunos casos, una uña nueva puede comenzar a crecer debajo de una uña vieja y muerta, y si continuamos con los microtraumatismos repetitivos, la nueva uña también puede quedar amoratada y desprendida. Para evitar esto, visita a tu podólogo para que te recorte o elimine por completo la uña muerta, lo que permitirá que la nueva uña crezca adecuadamente.

Consejos para evitar la aparición de uñas negras

Evitando o tratando de reducir el microtraumatismo repetitivo en las uñas. Para ello, asegúrate que utilizas unas zapatillas que se ajusten bien a tu pies. No obstante, en muchos casos el propio gesto deportivo va a provocar esos golpes continuos en la uñas. En este caso, lo mejor será acudir al podólogo para que te aconseje en tu caso concreto sobre cómo prevenir que tus uñas sufran de forma innecesaria. Y una buena higiene es fundamental, así como mantener las uñas correctamente cortadas.  

Y por último, un aviso importante. No todas las uñas negras aparecen por golpes, sino que en algunos casos las uñas negras aparecen sin causa aparente. Cuidado, porque puede ser signo de una enfermedad grave. Si tienes una uña negra y no conoces la causa que la ha provocado, es muy buena idea que visites a tu médico o a tu podólogo para que te examine y pueda hacer el diagnóstico y tratamiento precisos. Entre las posibles causas de una uña negra no provocada por un traumatismo están: las infecciones por hongos, una enfermedad subyacente (anemia, diabetes, enfermedad cardíaca, enfermedad renal), tratamientos con anticoagulantes, quimioterápicos o afecciones del sistema inmune, y cáncer de piel (melanoma en la uña).  

Para todos aquellos que sufráis de uñas negras, más allá de mostrarlas como insignia de vuestras grandes hazañas, recordad que hay muchos casos en los que una uña negra se recupera por sí misma pero, si no mejora, no lo dudéis y acudid a vuestro podólogo para que descarte problemas mayores.

Begoña García (Podóloga deportiva y especialista en biomecánica)