La tecnología ha avanzado mucho y en nuestras bicis cada vez hay más piezas de aluminio y carbono, y menos de acero -las susceptibles de oxidarse -. Aun así, y sobre todo en las zonas costeras y húmedas, puede aparecer el óxido. Por ello es interesante saber cómo evitar el óxido en la bici.
El óxido en la bici se trata de un inconveniente que los usuarios que viven cerca de la costa sufren de manera más habitual. Por eso, en lugares con mucha humedad es fácil que haya alguna parte de la bici en la que vaya apareciendo este problema.
Pero tranquilo, si eres uno de los que tienen que enfrentarse con este problema, te vamos a dar la solución. ¿Cómo podemos evitar el óxido en la bici? Sigue leyendo y lo sabrás.
EL TRUCO PARA EVITAR EL ÓXIDO EN LA BICI
Para evitar la oxidación de las partes ferruminosas lo que hay que hacer es crear una barrera de protección que impida el contacto del aire con el metal: es decir, engrasar.
El truco es mantener la cadena engrasada, con cualquier tipo de aceite. Y también el resto de componentes metálicos (con contenido de hierro) como piñones o tornillos. Para estos será más recomendable una grasa en spray.
¿Y EN LOS DISCOS DE FRENO CÓMO SE EVITA?
En cuanto a los discos de freno, aquí hay que tener especial cuidado: porque no se puede aplicar ningún producto, salvo algún tipo de pintura o barniz con cuidado de no contaminar la pista de frenado.
¿Has visto de qué manera tan sencilla se puede evitar el óxido en la bici? Pues mantén engrasadas esas piezas susceptibles de oxidarse y di adiós al oxido en la bicicleta.
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