Cómo elegir correctamente los pedales de carretera

Bien porque quieras dar el salto a los pedales automáticos, bien porque te has comprado bici nueva y no trae pedales… el caso es que necesitas unos pedales de carretera nuevos y tienes dudas a la hora de elegirlos: ¿Qué criterios debes tener en cuenta? ¿Cuáles son las diferencias entre los que valen 40€ y los que pueden llegar hasta los mil? ¡Te lo contamos todo en este post!

 

¿Cómo funcionan los pedales de carretera?

Los pedales automáticos funcionan siempre en pareja con calzado específico.

Cuando se presiona la zapatilla sobre el pedal, una cala fijada debajo de su suela es bloqueada por una articulación que suele funcionar gracias a un muelle, aunque hay versiones que usan otros materiales como el carbono.

 

 

Este principio se inspira directamente en las fijaciones de esquí: de hecho, la pionera en fabricar en serie este tipo de pedales fue la marca francesa Look, muy conocida en el mundo de la nieve.

Para separar el pie del pedal, es necesario un pequeño movimiento específico (generalmente una pequeño giro del talón hacia hacia afuera o hacia adentro).

Normalmente mediante un pequeño tornillo, se puede ajustar la fuerza de bloqueo del pedal: nosotras/os decidiremos la dificultad para sacar el pie del pedal.

 

 

¿Cuáles son las ventajas de los pedales automáticos de carretera? 

El conjunto pie/zapatilla/pedal va en unión y puedes pedalear con mucha más potencia y seguridad.

1. Seguridad:

Aunque para los que se van a iniciar en el uso de los pedales automáticos, al principio provoca inseguridad ir atado, tras esos primeros días, irás mucho más seguro sin temor a que un pie se te salga al esprintar, al coger un badén o un bache o en cualquier otra situación.

 

 

Ahora bien, cuando tú decidas sacar el pie o en caso de emergencia, podrás sacar el pie sin problema.

 

2. Eficacia del pedaleo y potencia:

Al tener la zapatilla anclada al pedal, puedes hacer fuerza en cualquier punto de la pedalada: no solo puedes pisar cómo en los pedales convencionales, sino que puedes tirar del pedal hacia arriba (es lo que se conoce como pedalear redondo).

 

 

Las zapatillas de ciclismo tienen una suela rígida que hace que se aproveche cada gramo de fuerza que empleamos en el pedaleo: si usamos unas zapatillas de deporte con pedales no automáticos se invierte mucha energía que no acaba realmente en la transmisión de la bici.

 

¿Cuáles son las diferencias entre los diferentes pedales a carretera?

1. Peso:

Aquí el peso es evidentemente importante, pero no es el punto primordial.

Cómo la mayoría de los componentes de la bicicleta, se le suele dar importancia al peso, y las diferencias entre unos modelos y otros pueden ser importantes.

Tenemos que comparar los pesos sumando los gramos del pedal y de la cala: hay marcas que hacen pedales más pequeños y cala grande y otras lo hacen al revés.

 

 

El conjunto pedales / calas de un precio de entrada puede ser de unos 350 gramos, en gamas altas pueden llegar a pesos por debajo de los 200 gramos.

 

2. Q-Factor:

El Q-Factor es la separación con la que tendremos las piernas a la hora de usar la bicicleta.

Esa medida es importante si queremos hacer una biomecánica casera o si nos hacemos un estudio más profesional.

Resumiéndolo mucho, para que tu músculos trabajen mejor tu posición en la bicicleta sea más cómoda y tu rendimiento sea cercano al óptimo, la separación de tus crestas iliacas, la separación de tus rodillas y de los pies, debe ser similar.

Algunas marcas dan la opción de ajustar el Q-Factor ya sea gracias al posicionamiento de las calas o intercambiando los ejes de los pedales.

 

 

Q Factor es la medida de la separación entre las bielas.

 

3. Altura de pie con respecto a eje:

También es un criterio de selección muy importante. De hecho, cuanto menor sea la distancia entre el eje de pedaleo y la zapatilla de ciclismo, menos energía se perderá y mejor será la transferencia de potencia.

Las sensaciones de pedaleo también serán mejores.

 

 

Una de las marcas que mejor dato consiguen aquí es Time.

 

4. Materiales:

En pedales de entrada de precio, los ejes serán en acero.

Según vas subiendo de gama irán mejorando hasta a llegar los de titanio que son más rígidos y más ligeros.

En cuanto a los rodamientos, en gamas bajas tendrán bolas y según vamos subiendo en gama pasamos a rodamientos de distintas calidades hasta llegar al top con rodamientos cerámicos.

 

 

El material con el que está confeccionado el cuerpo del pedal no solo afecta a su peso, sino también a su rigidez y durabilidad.Los más habituales son de aluminio, Composite o de carbono.

 

5. Superficie de apoyo:

Es la superficie en la que hay contacto entre la zapatilla/cala y el pedal. A mayor tamaño, mejor será el empuje y el aprovechamiento de la fuerza que enviaremos a los pedales.

 

6. Calas:

Cada marca de pedal funcionará con unas calas específicas de su marca o compatibles.

La elección de las calas tiene importancia porque, según el modelo que utilices, tu zapatilla no se moverá una vez anclada al pedal o te permitirá que se mueva una serie de grados.

 

Calas Shimano de carretera y sus angulaciones.

 

7. Precio:

Podemos encontrar pedales por poco más de 30 € o llegar a modelos con medidor de potencia que pueden costar más de 1000 €.

¡Ahora, con estos datos, tú decides! La oferta de pedales de carretera de nuestra web es muy grande y encontrarás los que se ajusten a lo que buscas.

 

 

La semana que viene te presentaremos una selección de pedales de carretera en la que mezclaremos la simplicidad de Look, la comodidad de Time y el rendimiento de Shimano o Garmin.

Ninguno es perfecto, pero te hemos aportado la información para ayudarte a elegir tus pedales de carretera con pleno conocimiento. ¡Es tu turno!

 

Por Federico Vuelta Fernández, de Forum Sport Alisal (Santander)

 

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